Luchemos por la vida alertó que el 47% de los muertos en accidentes de tránsito son motociclistas, que no tenían el casco o lo llevaban suelto.
La asociacion civil Luchemos por la vida que busca prevenir los accidentes de tránsito en Argentina alertó que cada año se incrementan los siniestros y las muertes en moto en el país.
“Casco en moto, la diferencia entre vivir o morir”, es el mensaje que comparte la organización que promueve la seguridad vial y se centra en contribuir a un comportamiento vial seguro. Es así que este jueves 7 de diciembre, Luchemos por la vida compartió una alarmante cifra: el 47% de los muertos en el tránsito son motociclistas, muchos de ellos no tenían el casco o lo llevaban suelto.
“El casco salva vidas al evitar o amortiguar los golpes y heridas en la cabeza, devastadoras y discapacitantes”, recuerda la asociación y detalla que, según un estudio reciente, el 31% de todos los traumatismos atendidos en los hospitales son víctimas de tránsito, y el 52% de ellos son motociclistas que no usan el casco.
Al usar casco: 73% menos mortalidad
De acuerdo a Luchemos por la vida, no usar casco al andar en moto aumenta hasta tres veces el riesgo de sufrir lesiones graves en la cabeza y cuatro veces el morir en un incidente vial.
De este modo, quienes utilizan casco tienen un 73% menos de mortalidad y hasta un 85% menos de lesiones graves que los que no lo usan.
“2.700 vidas se salvarían por año si todos los que circulan en moto y ciclomotor usaran siempre un casco homologado”, explica la asociación en un comunicado. A su vez, Luchemos por la vida solicita a las autoridades responsables incrementar el control de su uso y la sanción a quienes no lo usan.
¿Cómo funciona el casco en caso de impacto?
Absorbe parte de la energía del impacto con su estructura, y el cerebro golpea contra el cráneo con menos fuerza.
Dispersa la fuerza del impacto en una superficie más grande por lo que la energía del choque no se concentra tanto en una sola parte de la cabeza. Actúa como barrera que evita el contacto entre el cráneo y el objeto del impacto (por ejemplo, el suelo). (Infocielo)