En los últimos días comenzó a dispararse el precio de una de las verduras más consumidas en el país. La producción cayó y las ventas se desplomaron por sus precios extremadamente elevados.
Desde la llegada del nuevo gobierno hubo un aumento generalizado de precios, sobre todo en materia de medicamentos y alimentos. A la espera de una fuerte suba en las tarifas, algunos productos quedaron totalmente desfazados y sus precios son extremadamente altos, lo que hace muy difícil su compra. Esta situación se vive con una de las verduras más consumidas en la región, como lo es la lechuga.
En la actualidad, y al recorrer varias verdulerías, la lechuga escaló a un precio demasiado elevado. Similar al de un kilo de asado. En diversos comercios alcanzó el valor promedio de $7.000, convirtiéndose en un alimento sumamente costoso y casi imposible de pagar.
Si bien el fenómeno inflacionario impacta de forma contundente al bolsillo, existen otras razones externas que provocan la fuerte escalada del precio de la verdura. En tiempos de fuerte cambio climático, donde la gestión de Alberto Fernández tuvo un fuerte impacto económico producto de la feroz sequía que se vivió en el 2023, en esta oportunidad son las lluvias las que complican la producción.
Durante la semana pasada la lechuga aumentó un 100% en diferentes verdulerías tanto en el territorio bonaerense, como en el resto de la región. Los expertos opinan que la principal causa de este aumento son las extremas lluvias que afectaron la producción, con una fuerte pérdida y escases en la oferta.
En el mercado central, el precio de la lechuga promedia entre los $2.000 y $2.500. Sin embargo, en los comercios minoristas el precio es considerablemente mayor, por ser meses de alto consumo.
A su vez, las fuertes lluvias también provocaron un fuerte impacto en el principal cordón verte de la provincia de Buenos Aires, compuesto por los distritos de Florencio Varela y La Plata, lo que se ve reflejado en los altos precios en distintas regiones de la Provincia.
Si bien el precio está por las nubes, se espera que baje en los próximos días. Todo depende de cómo sea la nueva cosecha de lechuga en los principales centros de producción. (LaTecla)