En el Complejo Cerri estarán las instalaciones de medición para la toma de gas y eventualmente una planta compresora, según lo requiera el proyecto.
Además del proyecto de YPF y Petronas para exportar gas natural licuado (GNL), otras compañías también tienen en carpeta sus propias iniciativas. Una de ellas es Transportadora Gas del Sur (TGS) que diseña una planta de licuefacción del gas de Vaca Muerta que quieren construir y operar en Bahía Blanca.
A diferencia de la planta que quiere desarrollar YPF, ese proyecto rondará entre las 4 y 5,3 millones de toneladas de GNL por año, dependiendo del módulo que finalmente se decida, con cuatro trenes de esa capacidad, siendo una primera etapa de dos trenes para llegar a 2 o 2,5 millones de toneladas anuales. Así lo detallaron desde TGS en la Jornada de Midstream que organizó el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG) en Neuquén, en la que Mejor Energía participó.
TGS tiene decidido que el proyecto se instalará en Bahía Blanca, en la zona de Puerto Galván, donde tienen una planta de procesamiento de gas en el Complejo Cerri. La vinculación del complejo con la planta de licuefacción será a través de un gasoducto de 24 pulgadas y 16 kilómetros de longitud. En tanto, la posta de carga podría ser con almacenamiento flotante. Las tierras para una potencial ampliación también están reservadas.
Para lograr mayor eficiencia y mejorar los rendimientos económicos, una de las alternativas que está probada en el mundo es el de las estaciones modulares, que va creciendo de la mano de la demanda y el contexto de la compañía y del mercado. “En los últimos años está viéndose cada vez más seguido que la estrategia de lograr mayor volumen se logra con multitrenes de menor capacidad, pero con construcción de tipo modular”, Martín Coello, Jefe de Proyectos de TGS.
“Por supuesto, este sistema puede ser escalable casi de forma ilimitada y entrega una mayor flexibilidad para atender eventuales variaciones, ya sea en la demanda o en el suministro de gas, permitiendo apagar los trenes que queden fuera de servicio y manejar un shutdown del 50% de cada módulo”, explicó en las Jornadas de Midstream.
De acuerdo a la presentación realizada en Neuquén, TGS pretende que en el Complejo Cerri estén las instalaciones de medición para la toma de gas y eventualmente una planta compresora según lo requiera el proyecto. Para la instancia media y final de esta planta modular existen propuestas de endulzamiento del gas para reducir su contenido de dióxido de carbono, la deshidratación para la remoción de hidrocarburos pesados y, por supuesto, el tren de licuefacción con su sistema de refrigeración.
Para TGS y sus socios, Bahía Blanca tiene buenas condiciones climáticas, con vías de acceso adecuadas con todos los servicios y la localidad tiene una relación con el oil & gas a través del polo petroquímico -donde ven una posible sinergia con el GNL-. En paralelo, el consorcio Puerto de Bahía Blanco está llevando adelante un Plan de Desarrollo Portuario que puede adaptarse a las necesidades del nuevo negocio del GNL.
Mientras se aguarda para avanzar con el proyecto, TGS comprometió inversiones que suman los 320 millones para este 2024 y recientemente anunció un plan por 700 millones de dólares para ampliar la capacidad de transporte de gas de Vaca Muerta.
(Fuente: Mejor Energía)