El mes pasado, el Índice de Precios al Consumidor (IPC-CREEBBA) mostró una variación del 3,1%, reflejando un descenso de 1,3 puntos en relación al guarismo de agosto, el más bajo desde noviembre e 2021. La inflación acumulada durante 2024 alcanzó el 115,8% en tanto que la variación interanual ascendió a 228,5%.
Durante el mes de septiembre, en Bahía Blanca el mayor aumento a nivel capítulos fue en Educación, el cualregistró un crecimiento del 5,5% como consecuencia de variaciones en educación formal (6,7%), servicios educativos como cursos de inglés y computación, entre otros (3,8%) y útiles escolares (2%).
En segundo lugar se ubicó Bienes y servicios varios, con un incremento de 4,5% como resultado de variaciones en artículos de tocador (8,2%) y servicios de peluquería y para el cuidado personal (6,2%), por citar los más relevantes.
Salud, por su parte, se posicionó en tercer lugar con una variación del 3,9%. En este caso, los subgrupos con mayores variaciones fueron médicos y odontólogos (7%) seguido de elementos para primeros auxilios (5,6%) y servicios prepagos y auxiliares (5,2%).
Vivienda exhibió un alza de 3,8% durante septiembre traccionado principalmente por variaciones en alquileres (5,2%), servicios sanitarios, gas y otros combustibles (4,1%) y materiales y mano de obra (2,7%).
Por último, Alimentos y bebidas evidenciaron un crecimiento del 3,7%, mostrando un leve retroceso respecto del mes anterior. Los mayores incrementos se observaron en caldos y sopas concentradas (16,8%), masas precocidas y tapas (12,5%), galletitas dulces (11,7%), helados (11,4%), gaseosas (10,3%), soda y agua mineral (10,2%), aderezos y fiambres (10% en ambos casos), carnes de ave fresca (9,4%), cerveza (8,8%) y pescados y mariscos frescos (8,6%), entre otros
Durante septiembre, los bienes y servicios Regulados se ubicaron por encima del resto de las categorías, registrando un aumento del 3,9% en relación al mes anterior. Esta variación se explicó principalmente por alzas en educación formal (6,7%), alquiler de la vivienda (5,2%) servicios sanitarios, gas y otros combustibles (4,1%) y transporte urbano (3,1%).
En segundo lugar, se ubicó la categoría Núcleo, cuya tasa de crecimiento ascendió a 3,7%, impulsada por caldos y sopas concentradas (16,8%), masas precocidas y tapas (12,5%), galletitas dulces (11,7%), helados (11,4%), gaseosas (10,3%), sodas y agua mineral (10,2%).
Por último, la categoría Estacional exhibió una disminución del 2,1%. Las variaciones negativas más importantes se dieron en verduras, tubérculos y legumbres frescas (-5,7%), hoteles y excursiones (-2,1%) y calzado para mujer (-2%).
En tanto que las alzas más relevantes se produjeron en frutas frescas (3,3%) y calzado para hombre (1,1%).
Respecto a los precios de la canasta de veinte variedades básicas de alimentos en la ciudad (cuadro 5), los productos que más se encarecieron fueron los siguientes: papa (11,3%), agua mineral (10,3%) y naranja (9,6%) en tanto que las principales bajas se presentaron en leche fresca (-2,8%) y pan (-2,9%).