La compañía del Grupo Techint, Tecpetrol, se encuentra en etapa de ingeniería básica de un proyecto de módulos onshore. Aún no está definida la locación. El puerto local es una de las opciones, además de Río Negro.
El gas de Vaca Muerta está en la antesala de un salto de escala cuantitativo, que implica un gran desafío: concretar inversiones en licuefacción que permitan abrir grandes mercados en horizontes lejanos como Asia, la India o Europa. En esa aventura ya están embarcadas tres de las mayores productoras del shale neuquino. Además de los anuncios de YPF y Pan American Energy (PAE) para producir GNL en el Golfo San Matías, Tecpetrol avanza, en silencio, su propio proyecto.
Fuentes de la industria indicaron a +e que la compañía del Grupo Techint y principal productora de shale gas, madura desde hace un año y medio la posibilidad de construir una planta licuefactora. A diferencia de las iniciativas de PAE e YPF, el proyecto de Tecpetrol no incluye la instalación de buques licuefactores, sino de la construcción de módulos onshore. Si bien aún no está definida la locación, y Río Negro también está entre las opciones, a priori el puerto de Bahía Blanca aparece como el sitio con mayores ventajas comparativas para ese tipo de planta.
Cómo es el proyecto de GNL de Tecpetrol
La compañía se encuentra en etapa de Front-end engineering design (FEED), en la cual se define la ingeniería básica, que estará culminada para mediados de 2025, paso ineludible antes de pasar a la etapa de definición final de inversión.
El primer módulo tendría una capacidad de producción de entre 2 y 4 millones de toneladas anuales (MTPA) de GNL, y en etapas sucesivas podrían incrementar la capacidad, en la medida que se sumen nuevos jugadores al proyecto.
La lógica que impera detrás de esta iniciativa indica que el contexto argentino dificulta la concreción de plantas de mayor escala, que implicarían el alineamiento de varios actores para concretar inversiones multimillonarias.
Los proyectos de PAE e YPF
Hoy, el proyecto de GNL con mayor grado de avance en la Argentina es el de PAE con la empresa noruega Golar, quienes días atrás anunciaron la elección de la costa rionegrina para instalar a partir de 2027 el buque Hilli Episeyo, de 2,45 MTPA de capacidad de licuefacción.
Inicialmente, el buque se abastecerá de gas natural de las cuencas del sur del país como la Cuenca Marina Austral y el Golfo San Jorge, a través de la utilización de la capacidad existente en el Gasoducto San Martín. Se trata de una ventaja competitiva clave a la hora de realizar las inversiones en infraestructura necesarias para llevar el gas hasta el buque licuefactor.
Mientras que el proyecto más ambicioso es el de YPF, también en Río Negro, que sufrió el traspié de la inminente salida de Petronas. La empresa malaya tendría decidido no avanzar con la inversión, estimada en 30 mil millones de dólares. El plan que se venía negociando consistía en la llegada de un buque licuefactor para 2026 de 1,2 MTPA. Mientras que para 2029, el proyecto escalaría a 8-9 MTPA, con dos nuevos barcos, y hacia 2030-2032, se sumaría una capacidad de entre 15 y 20 MTPA mediante módulos onshore. Ese megaproyecto necesita de la construcción de tres gasoductos dedicados de casi 600 km de extensión, entre Neuquén y Punta Colorada.
Casi caída la participación de Petronas, el presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, busca tentar a grandes compañías multinacionales como Shell, Exxon y Chevron para que se suban al proyecto de GNL como offtskers.
Pampa Energía, a través de su subsidiaria TGS, también analiza desde hace un par de años su propio proyecto de GNL, a través de la construcción de plantas modulares en Bahía Blanca. Aunque en la compañía no están seguros de avanzar por las dudas de competitividad. Analizan subirse a algunas de las iniciativas de las otras productoras para generar mayor escala. (Más Energía)