Así lo confirmó en las últimas horas, el director general de Cultura y Educación bonaerense, Alberto Sileoni, dando cumplimiento a los 190 días de ciclo lectivo.
“Hay un acuerdo del Consejo Federal de Educación de empezar las clases el 1º de marzo, fue un acuerdo que tuvo el consenso en la última reunión. La Ciudad Autónoma de Buenos Aires siempre tiene esa intención de diferenciarse, pero nosotros no vamos por ese lado”, afirmó el titular de la cartera educativa bonaerense en declaraciones radiales.
“Nosotros demostramos nuestro interés por la educación con presupuesto y construcción de escuelas. La Ciudad de Buenos Aires tiene una tendencia a un discurso más efectista, en este caso, tiene dos días más de clase, y no me parece mal”.
En ese sentido, agregó que “buena parte del país empezará el 1º de marzo” y explicó que la fecha de finalización del ciclo 2023 será para toda la Argentina el 22 de diciembre.
“Son 190 días, es un consenso que venimos sosteniendo, los 180 días obligatorios pero con una tendencia de que cada año se añadan más días, ya que con la pandemia nos dimos cuenta que el día de clases es insustituible, hay que cuidarlo”, aseveró el ministro.
En cuanto a empezar en marzo, Sileoni dijo que Buenos Aires es “una provincia receptora de turismo y eso se tiene en cuenta, al igual que lo ha tenido en cuenta el Consejo Federal para toda la Nación”.
“Al empezar el 1 de marzo, son 190 días, es una duración de ciclo lectivo importante, nosotros en poco tiempo más añadimos la extensión de jornada, incorporamos centenares de escuelas a la doble jornada, son más días, más horas. La pandemia ha dejado aprendizajes caídos y hay que recuperarlos”, aseguró.
Intento de magnicidio
El titular de la cartera educativa bonaerense defendió que se trate en las escuelas lo vinculado a los discursos del odio, en base a lo ocurrido tras el intento de magnicidio a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
“Nos estamos dando cuenta que no fue un loquito suelto, y que, si hay un plan para matar a una Vicepresidenta, eso se llama intento de magnicidio y, a mi juicio, es rozar un límite tras el cual está la oscuridad”, opinó el funcionario.
Sobre este punto, Sileoni expresó: “Si hubiera salido la bala no estaríamos desarrollando esta conversación, ¿cómo que eso no entra en la escuela?”.
En ese marco, consideró que parte de la oposición “no entiende que la escuela no le abre la puerta a esos temas, sino que los chicos son los que lo llevan”.
“Hay un profundo desconocimiento de lo que pasa en las aulas”, dijo el ministro y manifestó que un profesor, ante una pregunta sobre la temática, “debe dar su palabra, puede dar su opinión, sería una hipocresía esconderla, pero debe garantizar que todas las voces e interpretaciones se expresen y dejar un final abierto”.
“Los discursos de odio no los inventó Cristina Kirchner, tienen 30 años en la literatura internacional, tampoco somos necios; un discurso de odio no es lo mismo que una acción, pero también hay mucho consenso que en que los discursos de odio van preparando las acciones de odio”, indicó aseveró en diálogo con Radio Cooperativa. (DIB)