“Bahía Blanca no va a pagar lo que no le corresponde”, dijo Luis Calderaro en referencia al reclamo de la empresa por la deuda de $7.500 millones.
El jefe de Gabinete del Municipio de Bahía Blanca, Luis Calderaro, afirmó que la deuda reclamada por EDES por el consumo eléctrico en barrios vulnerables debe ser asumida por la Provincia de Buenos Aires, y no por la comuna, tal como ocurre en otros distritos del territorio bonaerense.
La respuesta oficial se dio luego de que la distribuidora eléctrica enviara una carta documento, fechada el 4 de noviembre, reclamando el pago de $7.489 millones correspondientes al suministro que reciben distintos asentamientos a través de medidores comunitarios. Según el reclamo de EDES, el Municipio habría dejado de cubrir esas facturas desde junio de 2024, incumpliendo un convenio firmado en 2004.
En conferencia de prensa, Calderaro aseguró que el servicio está garantizado: “No va a haber ningún corte. Bahía Blanca no va a pagar lo que no le corresponde”, afirmó, al señalar que el intendente Federico Susbielles tomó la decisión de exigir que la Provincia asuma el costo, tal como ocurre en el AMBA.
“Una familia que vive en un barrio vulnerable de Bahía Blanca tiene la misma situación que una de Almirante Brown o La Matanza. En el conurbano lo paga la Provincia; acá pretenden que lo pague el municipio. Eso no lo vamos a aceptar”, enfatizó el funcionario.
Calderaro explicó que actualmente funciona una mesa técnica integrada por el Municipio, EDES, el Ministerio de Infraestructura bonaerense y el OPISU. Allí se analiza barrio por barrio cuántos hogares están conectados mediante medidores comunitarios y cuáles serán los pasos para avanzar hacia un esquema con medidores individuales, con el fin de ordenar la transición “sin que eso implique una factura impagable para las familias”.
El jefe de Gabinete recordó que el Municipio ya tiene licitaciones en marcha, realizadas en julio, para llevar infraestructura eléctrica formal a barrios como Vita, Tierras Argentinas, Caracol 2, entre otros, lo que beneficiará a más de 6.000 familias.
Sobre la intimación de EDES, Calderaro reconoció que la carta “llamó la atención”, porque —según indicó— el diálogo con la empresa venía desarrollándose “con normalidad”.
“Tenemos buena relación con EDES. Por eso sorprende que se haya filtrado una carta que ni siquiera interrumpe el trabajo que venimos haciendo”, señaló.
Finalmente, adelantó que el martes próximo se retomarán las reuniones con la distribuidora para seguir definiendo responsabilidades y avanzar en el proceso de regularización del servicio eléctrico en los barrios vulnerables de la ciudad.









