Este fin de semana se reunió, por primera vez, la Mesa Provincial de Truficultores Bonaerenses. Juntó a referentes de Tornquist, Guaminí, Coronel Suárez, Saavedra y Carhué.
El cultivo de trufa negra comienza a mostrar sus primeros resultados para la provincia de Buenos Aires. Sobre todo en la pequeña localidad de Espartillar, partido de Saavedra, donde se encuentra la trufera más grande del país que viene apostando a este diamante de la gastronomía mundial desde 2011. El gobierno le mete fichas.
El fin de semana pasado se hizo la cuarta edición de la Fiesta de la Trufa Negra, Trufar, que se hace anualmente en Espartillar desde 2022. El ministro de Desarrollo Agrario bonaerense, Javier Rodríguez, participó del evento y encabezó lo que fue la primera Mesa Provincial de Truficultores Bonaerenses. “Puedo asegurar que hoy también somos una provincia trufera“, destacó en ese marco.
La trufa negra es un hongo muy codiciado a nivel mundial por la gastronomía de alta gama. Crece en las raíces de cierto tipo de árboles bajo condiciones muy específicas por lo que su producción debe ser muy precisa. Actualmente, en la provincia de Buenos Aires hay varios campos truferos que están obteniendo sus primeros resultados con entusiasmo.
Probablemente, uno de los más reconocidos sea el de Espartillar que pertenece a la empresa Trufas del Nuevo Mundo. Se trata de una iniciativa que empezó en 2011 con 50 hectáreas y que hoy exporta trufas a Europa y Estados Unidos. Hacia 2023 ya tenían más de una docena de empleados y cosechas anuales superiores a los 200 kilos.
En este contexto, el ministro Rodríguez celebró que “en los últimos 5 años ha crecido de manera sustancial la diversificación productiva”. “Hace 5 años para muchos era impensable una provincia de Buenos Aires con olivos, vinos y trufas“, completó. Según se informó desde su cartera, “no solo ha ganado escala sino también relevancia” y en el municipio de Saavedra “la truficultura dejó de ser una rareza”.
En el Ministerio de Desarrollo Agrario consideran que la truficultura cumple con dos “objetivos centrales” porque ofrece “nuevas oportunidades para diversificar la matriz productiva” y también permite “agregar valor en origen”. Ante esto, el funcionario de Kicillof aprovechó la primera reunión de la mesa provincial para poner a disposición su infraestructura científica. “Tenemos un sistema de 16 chacras experimentales que están en la posición de pensar en los desafíos tecnológicos que podamos tener”, aseguró. (Infocielo)
