Los nueve cargos más importantes de la Defensoría del Pueblo bonaerense están ocupados por varones. Es un organismo que tiene más presupuesto que todo el Ministerio de las Mujeres. Avanza un proyecto que establece la paridad de género.
La Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires no sólo es un organismo que cuenta con más presupuesto que varios ministerios, como detalló hace un tiempo Diputados Bonaerenses, sino que también la paridad de género brilla por su completa ausencia en lo más alto de la estructura de mando.
Detrás del defensor del Pueblo, el peronista Guido Lorenzino, que transita su segundo mandato, hay otros siete adjuntos, de variado pelaje político, pero todos varones. No hay ni una sola mujer dentro de las máximas autoridades de la Defensoría del Pueblo bonaerense.
En estos días se cumple un año, desde que la Legislatura bonaerense ampliara la estructura de la Defensoría del Pueblo, renovara autoridades y ocupara los nueve casilleros con varones.
Resulta ejemplificador que, en 2023, la Defensoría del Pueblo bonaerense cuente con un presupuesto de $5.328.030.000, más del doble que el año pasado, que supera ampliamente las partidas del Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género, y Diversidad Sexual, que preside Estela Díaz.
Sumado a eso, la Defensoría del Pueblo bonaerense carece de cualquier tipo de contralor institucional, dado que la comisión Bicameral del Defensor del Pueblo (Ley N°13.834), de la Legislatura, está completamente paralizada.
Resulta paradójico: la Defensoría del Pueblo bonaerense tiene como objetivo fiscalizar a las “instituciones y funcionarios/as de gobierno para el cumplimiento de sus deberes y el respeto de la Constitución y las leyes”, pero no existe ningún tipo de contralor parlamentario. Es una caja “ministerial” sin control.
Esta semana en la comisión de la Mujer de la Cámara de Diputados, las legisladoras aprobaron un proyecto de ley de autoría de la referente del Frente Grande, Susana González, que busca establecer la paridad de género en la elección de los cargos de los Defensores Generales y Adjuntos.
“Resulta imprescindible y necesario que un Organismo Constitucional encargado de la defensa de derechos y de la protección de los más vulnerables respete en su conformación la participación equitativa de género en su faz institucional“, sostuvo González en el seno del cuerpo parlamentario durante el tratamiento de la iniciativa.
En los considerandos del articulado, la diputada bonaerense cuestiona que, en la reforma sancionada en 2022, no se hayan designado dirigentes mujeres. “Los cargos de Defensores Generales y Adjuntos se ampliaron en número, sin que se haya nombrado tan solo una mujer. Basta apreciar la conformación actual”, objetó González.
La diputada enfatiza en la necesidad de “garantizar el acceso igualitario de las mujeres a los cargos jerárquicos, en este caso particular el Defensor del Pueblo, que es ni más, ni menos, quien debe velar precisamente por la defensa de sus derechos y ser un ejemplo para todas las instituciones públicas”.
Con el visto bueno de la comisión de Mujer de la Cámara de Diputados, ahora el proyecto de Susana González deberá sortear los cuerpos de Legislación General, de Asuntos Constitucionales y Justicia y de Presupuesto e Impuestos. (diputadosbsas)
