Con más de 12 kilómetros de intervención y un esfuerzo operativo, el titular del Área de Obras Públicas de la Municipalidad de Bahía Blanca, Gustavo Trankels, detalló en CAFEXMEDIO los avances de la limpieza y reconformación del cauce del arroyo Napostá, y anticipó lo que se viene para el canal Maldonado.
“Lo que se terminó ahora como etapa de trabajo es sobre el cauce del arroyo Napostá entre el partidor del Parque de Mayo hasta su desembocadura”, explicó Trankels. Se trata de más de 12.200 metros lineales intervenidos en distintas etapas: desde tareas a cielo abierto hasta trabajos manuales dentro del entubado, donde no era posible ingresar con maquinaria pesada.
En el primer tramo, de 1.200 metros desde el partidor hasta la calle Casanova, se removieron elementos que obstaculizaban el escurrimiento: puentes peatonales, columnas de alumbrado, escombros y sedimentos. Allí, se respetó la pendiente natural del arroyo pero se amplió la sección en sectores sedimentados, todo bajo supervisión de Hidráulica de la Provincia.
Desde ese punto hasta inmediaciones de la Terminal de Ómnibus —unos cuatro kilómetros— se trabajó dentro del entubado. “Fue una tarea manual con equipos de corte y mini cargadoras, porque lo que había dentro eran plantas, basura y algo de escombros”, detalló.
Finalmente, los 7.000 metros restantes, desde la terminal hasta la ría en Ingeniero White, también fueron objeto de limpieza y reconformación de cauce y taludes, permitiendo liberar por completo el canal del arroyo y redireccionar ahora los esfuerzos hacia el Maldonado.
“La gran ventaja es que ahora podemos redirigir más maquinaria hacia el Maldonado para despejar losas y estructuras afectadas por la tormenta, porque baja el nivel de agua en ese canal”, subrayó Trankels. Y añadió: “Ya veníamos trabajando con retroexcavadoras Longreach, pero ahora que el nivel de agua bajó, se podrá ingresar al canal propiamente dicho con equipos de gran porte”.
Consultado sobre las losas y estructuras socavadas, señaló que algunas serán removidas y otras se conservarán si están estables, en función de su aporte a la contención del canal. Además, se evaluarán los daños estructurales en puentes y pilares que hasta el momento estaban bajo agua.
Respecto de los plazos para las obras sobre el Maldonado, fue claro: “No hay una fecha precisa porque es una obra que no era previsible. Uno va encontrando situaciones: cañerías, servicios, estructuras dañadas… por eso trabajamos con varios equipos a la vez, para que todo suceda a la mayor brevedad posible”.
Trankels también destacó el compromiso de los distintos actores involucrados: “Se trabajó durante los fines de semana y casi sin pausa. Hay que reconocer el esfuerzo de la Cámara de la Construcción de Bahía Blanca y de las empresas convocadas. Fue un trabajo en tiempo récord”.
Finalmente, subrayó la necesidad de realizar mantenimientos frecuentes, especialmente en el tramo entubado, donde existen sectores propensos a obstrucciones. “Hidráulica de la Provincia ya diseña un plan de mantenimiento periódico según las características de cada tramo”, cerró.
Una obra que no solo fue técnica sino urgente, y que sienta las bases para una Bahía Blanca más preparada ante eventos climáticos extremos.
