mar. 29 de abril de 2025
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ENTREVISTA EN CAFEXMEDIO

Julieta Caruso, la cocinera bahiense que conquistó el mundo y volvió para ayudar a su ciudad

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Nacida en Bahía Blanca pero criada en Bariloche, esta cocinera —como ella prefiere definirse— ha trazado un recorrido profesional que la llevó de lavar platos durante su adolescencia a ser parte fundamental de cocinas de renombre internacional en España y Asia.

Sin embargo, más allá de los reconocimientos, Julieta Caruso conserva la misma sencillez y pasión por los productos nobles y el arte de cocinar.

“Cocinera es la profesión; chef es una cuestión jerárquica”, responde sin dudar en CAFEXMEDIO cuando se le pregunta por su preferencia terminológica. Y es que para ella, más que títulos, importa el hacer: “Las escuelas suman, los libros también, pero esta es una profesión que se aprende con experiencia”.

Radicada actualmente en Buenos Aires, Julieta lidera la cocina del restaurante Casa Cavia, un elegante espacio ubicado frente a Plaza Alemania, que describe como “un oasis en medio de la ciudad”. Allí despliega una propuesta gastronómica cuidada, que se adapta a cada momento del día, y en la que los productos argentinos tienen un lugar protagónico.

Pero más allá de su actividad profesional, Caruso también se destaca por su compromiso social. Tras las devastadoras inundaciones sufridas por Bahía Blanca, impulsó una jornada solidaria junto a colegas cocineros. “Dije, bueno, ¿qué es lo que yo sé hacer? Cocinar. Y empecé a convocar colegas”, cuenta con emoción aún palpable. El evento fue un éxito rotundo: “Tuvimos que cerrar antes porque se había vendido todo. Cada cocinero donó su tiempo y su producto. Lo único que queríamos era juntar la mayor cantidad de plata posible”.

La recaudación fue entregada directamente a la Fundación Sí, que trabaja en el territorio afectado. “Todo estaba muy claro y muy transparente. Cuando las cosas se hacen así, salen bien”, afirma. Su relato deja ver no sólo su profesionalismo, sino también una profunda sensibilidad y sentido de pertenencia.

En su paso por el País Vasco, Julieta aprendió la importancia del respeto por el producto. “Cuando tenés un buen producto, no le tenés que hacer nada”, sentencia. Hoy traslada esa filosofía a su trabajo diario, y valora especialmente la producción regional argentina: “Hay muy buenos productos en nuestro país, el problema muchas veces es la logística”.

Consultada sobre los sabores que más la sorprendieron últimamente, menciona el vinagre de membrillo de La China Müller, de Bariloche, como uno de los hallazgos más espectaculares.

Julieta Caruso es de esas personas que no se olvidan de dónde vienen. Con una trayectoria internacional impecable y un presente sólido en uno de los mejores restaurantes de Buenos Aires, sigue conectada con sus raíces y comprometida con su gente.