Se activó un protocolo de desastres que incluyó la recaudación de donaciones y la organización de sesiones de meditación en línea para los damnificados.
La Fundación El Arte de Vivir informó que implementó acciones para atender los efectos psicológicos del temporal del 7 de marzo, mediante la meditación y ejercicios de relajación.
A tres semanas del temporal que afectó a Bahía Blanca, la ciudad comenzó a transitar su camino hacia la normalidad, aunque persiste un impacto menos visible pero de mayor duración que el material: el emocional. La pérdida de seres queridos, el temor y la tristeza son efectos del desastre que requieren atención especializada. En este contexto, la Fundación El Arte de Vivir informó que implementó “acciones para atender los efectos psicológicos del suceso mediante la meditación y ejercicios de relajación”.
Natalia Giraud, miembro de la Comisión Directiva de la organización e instructora de cursos en barrios vulnerables, explica en un comunicado que “se activó un protocolo de desastres que incluyó la recaudación de donaciones y la organización de sesiones de meditación en línea para los damnificados”.
Giraud destaca que “la organización cuenta con un protocolo de atención postraumática aplicado en distintos países”. Según detalla, “los efectos psicológicos pueden prolongarse en el tiempo, por lo que resulta esencial brindar apoyo emocional”.
La fundación participó en la asistencia a víctimas de eventos como la erupción del volcán Puyehue en 2011 y las inundaciones en La Plata en 2013.
Técnicas de respiración
Desde El Arte de Vivir comentan que trabajan “en zonas devastadas por desastres naturales como Bahía Blanca, donde las consultas de salud mental se multiplicaron por cinco, brindando herramientas de alivio”. Agregan que “los voluntarios que viajan desde todo el país para ayudar en la catástrofe enseñan las técnicas y brindan asistencia cubriendo las necesidades básicas”. Así, “imparten programas de alivio postraumático, brindando apoyo y herramientas para que los damnificados puedan continuar con sus vidas”.
Según explican, “con la ayuda de las técnicas de respiración y meditación las personas que sufren de insomnio son capaces de recuperar el sueño, muchos experimentan alivio de la depresión, ansiedad, presión alta, migraña y otros desórdenes psicosomáticos como consecuencia del estrés”.
Afirman que “la respiración es una de nuestras principales fuentes de energía y si se aprende a respirar de manera consciente se pueden obtener beneficios como mejorar el sistema nervioso, inmunológico y cardiovascular; reducir el estrés, la depresión, y el trastorno de estrés postraumático; y aumentar el bienestar mental y físico”.
“Estas técnicas -destacan- están científicamente comprobadas para regular la presión arterial, la diabetes, el colesterol y muchos otros síntomas físicos”.
De esa manera, “las iniciativas implementadas en Bahía Blanca buscan ofrecer herramientas para afrontar las secuelas emocionales del desastre y contribuir al proceso de recuperación de los damnificados”.
“La combinación de apoyo humanitario y estrategias de bienestar integral forma parte del enfoque adoptado para mitigar los efectos a largo plazo del temporal”, cierra el texto.
En línea y presenciales
En este contexto, la Fundación ofrece meditaciones diarias en línea a las 19.30. Para sumarse, hay que ingresar al este grupo de WhatsApp: https://chat.whatsapp.com/I9rCR3f3OxNBn1bkc9Hhq2
Mientras tanto, la organización anunció que llevará a cabo durante el mes de abril diversas actividades relacionadas con la meditación de forma gratuita en centros culturales y deportivos de Bahía Blanca. (DIB)
