“La situación actual recuerda a la incertidumbre que vivió el INTA durante los años noventa y sostuvo que es necesario generar acciones legislativas, con el fin de evitar los mismos errores del pasado”.
La legisladora provincial de la Unión Cívica Radical (UCR), Nerina Neumann, expresó su preocupación respecto a las definiciones del gobierno de Javier Milei sobre el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y recuperó un proyecto que presentó en la Legislatura bonaerense, en el que reclamó por la integridad y autarquía de la institución, que ocupa un lugar clave en el fortalecimiento de las economías regionales.
“El INTA es un símbolo del federalismo y un pilar fundamental para el arraigo territorial. No podemos permitir que decisiones apresuradas pongan en peligro una institución tan trascendental para el campo argentino y, particularmente, para nuestra provincia”, expresó la senadora a través de su cuenta de “X“.
Al respecto, Neumann advirtió que las recientes decisiones del Gobierno nacional, como despidos, jubilaciones anticipadas y la posible venta o concesión de más de 25.000 hectáreas de campos experimentales, afectan directamente a los pequeños y medianos productores, quienes dependen del apoyo técnico del organismo para mejorar su competitividad.
En ese marco, la legisladora radical remarcó que la situación actual recuerda a la incertidumbre que vivió el INTA durante los años noventa y sostuvo que es necesario generar acciones legislativas, con el fin de evitar los mismos errores del pasado.
“El INTA ha demostrado seriedad, utilidad y compromiso con el desarrollo rural. Es fundamental que lo defendamos, no solo como un recurso del sector agropecuario, sino como un símbolo de federalismo y sustentabilidad que el país necesita para progresar”, afirmó Neumann.
En línea con la senadora radical por la Sexta sección electoral, la diputada bonaerense, Romina Braga, del bloque Coalición Cívica, adhirió a la preocupación y criticó duramente el rumbo que está tomando la actual conducción nacional, a través del organismo.
“Debilitar al INTA es debilitar al campo, a la ciencia y al futuro productivo del país. El propio director del organismo advierte que, con los recortes actuales, la situación puede volverse irreversible. Esto no es eficiencia: es desmantelamiento”, advirtió la diputada bonaerense.
En ese sentido, Braga citó declaraciones del director nacional del INTA, Ariel Pereda, quien aseguró que en el último año y medio la plantilla se redujo en 650 trabajadores, lo que representa una baja del 10%. Si se consideran las jubilaciones y retiros previstos, a fines de 2025 la dotación podría caer un 16%, y si se toma en cuenta la dotación óptima, la reducción llegaría al 23%.
Durante su alocución, Pereda también alertó que el Gobierno busca modificar la composición del Consejo Directivo, con la salida de universidades y entidades representativas del sector privado.
“La posibilidad de que un DNU defina una nueva constitución del Consejo y centralice la administración condicionará la toma de decisiones y convertirá al INTA en un organismo político, sujeto a los vaivenes del color político de los gobiernos de turno”, explicó el director nacional
El INTA, que lleva más de 68 años dedicado a la investigación, innovación y transferencia tecnológica en el sector agropecuario, enfrenta en los últimos meses una serie de medidas que ponen en riesgo su funcionamiento.
El organismo funciona bajo la órbita de la Secretaría de Agricultura de la Nación y se financia con recursos mixtos, que incluyen ingresos propios y fondos concursados a nivel nacional e internacional. Asimismo, cuenta con una estructura federal que abarca todo el país a través de estaciones experimentales y agencias, consolidándose como un actor esencial para promover la producción sostenible y el arraigo rural en distintos niveles productivos.
