El subsecretario de Asuntos Electorales y Parlamentarios, Javier Rehl, cuestionó la lista de candidatos bonaerenses al alegar que “no era competitiva”.
El subsecretario de Asuntos Electorales y Parlamentarios, Javier Rehl, dio su análisis sobre los resultados en los comicios en declaraciones radiales. Según el, también, concejal de Escobar que responde al intendente Ariel Sujarchuk y al ministro de Gobierno, Carlos Bianco, la titular del Partido Justicialista (PJ) nacional, Cristina Kirchner, tiene “un grado de responsabilidad” de la derrota.
Así, a más de cuatro días de la derrota electoral del peronismo en la provincia de Buenos Aires y todo el país, los dirigentes el PJ continúan con su fuego cruzado para ver quién es más responsable de la catástrofe en las urnas. En las últimas horas, un funcionario de Axel Kicillof aseguró que la lista bonaerense que armó la vicepresidenta, Cristina Kirchner “no fue competitiva”.
“Ella es la presidenta del PJ a nivel nacional y el domingo tuvimos una derrota en todo el país. Algún grado de responsabilidad tiene, en el caso de la provincia constituyó una lista que no es competitiva, por compañeros que tienen un valor y los queremos, pero no son representativos. Ninguno conduce un distrito ni ha ganado una elección, es imposible que mueva el amperímetro esa lista y genere mucha expectativa”, dispuso Rehl.
En ese sentido, el funcionario provincial se hizo eco del volantazo que pegó el electorado bonaerense entre las votaciones del pasado 7 de septiembre y las elecciones del pasado domingo, donde la provincia de Buenos Aires pasó de estar teñida de celeste a ser casi violeta.
“Uno se pregunta qué pasó en 50 días para que cambie todo. Ahí entran a hacerse muchos análisis pero lo real es que cambio el interés, porque es una elección distinta la nacional que la provincial. En septiembre primó la cuestión de valorar lo local, lo que el vecino tiene más a mano, y en octubre privilegió abrazarse a que el gobierno no termine colapsando”, reflexionó el edil escobarense.
El lunes por la mañana, a tan solo horas de conocerse los números finales de las elecciones legislativas, la sede del PJ bonaerense en La Plata amaneció con carteles en los que se exigía la renovación de autoridades y se cuestionaba la conducción de Máximo Kirchner. Sobre eso, Rehl condenó esa forma de protesta pero coincidió en que el peronismo debe a ir a una interna para definir su cúpula de gobierno.
“El PJ está mal porque los compañeros no tienen que hacer eso, las disputas son puertas adentro y con reglas claras. Estas protestas no forman parte del ideario peronista, más allá de la crítica que tenemos todos para quien conduce el partido a nivel provincial. Nadie quiere pelear ni ir a una interna porque nadie quiere perder. Así es muy difícil”, señaló el subsecretario de Asuntos Electorales y Parlamentarios.
Un intendente también culpo a Cristina Kirchner por la derrota electoral
El intendente de Salto, Ricardo Alessandro, responsabilizó directamente a La Cámpora por la derrota del peronismo en la provincia de Buenos Aires, al sostener que la agrupación conducida por Máximo Kirchner “le hace mal al peronismo”. Además, auguró que Kicillof “no va a ser potable a nivel nacional mientras siga ligado” a ese sector.
En declaraciones radiales, Alessandro cuestionó la postura pública de Máximo Kirchner durante la noche electoral y criticó el tono festivo del palco en la casa de Cristina Kirchner pese al resultado adverso. “La gente no quiere más a La Cámpora, no lo quiere más a Máximo Kirchner ni a Cristina bailando en el balcón”, afirmó el jefe comunal, que analizó que el electorado “castigó la centralidad política de la agrupación”, y consideró que el peronismo “perdió volumen social porque dejó de representar lo que la sociedad estaba pidiendo”.
En ese sentido, el intendente de Salto sostuvo que la ciudadanía votó en clave de recambio dirigencial y apuntó a lo que definió como “el agotamiento del discurso camporista”, al tiempo que defendió la gestión provincial de Kicillof, a quien desligó de la derrota. “El gobernador en muchas cosas está atado de pies y manos. Hay obras que no se pudieron mandar a Salto, como el camino a Berdier”, expresó, al sugerir que la estructura política que rodea al mandatario limita su potencial electoral.
Alessandro fue aún más duro al plantear que la continuidad de esa conducción interna afecta cualquier proyecto 2027: “Yo quiero que Axel sea presidente, pero no creo que sea potable mientras esté al lado de Máximo Kirchner y Juan Grabois”. Según su mirada, el gobernador podría consolidar liderazgo propio solo si se despega de la lógica orgánica de La Cámpora, un diagnóstico que ya circula entre intendentes peronistas del interior con peso territorial. (Infocielo)

 
 
 
  
  
  
  
  
  
 






