Esta tarde, en inmediaciones de la desembocadura del arroyo Claromecó, en la localidad homónima, se vivió una particular situación. Es que personal de Prefectura se complicó para sacar su moto de agua y terminó enterrando el cuatriciclo que utilizaban en esa tarea. “Casi se lo lleva el mar”, dijeron absortos testigos del hecho.
Turistas que se encontraban en el lugar terminaron ayudando a los agentes que afortunadamente pudieron “rescatar” el vehículo de trabajo. (LU24)